Si escribes en cualquier buscador de Internet las palabras “España, pornografia, infantil” observarás que inmediatamente la página se llena de noticias de apenas hace unos días. Tristemente, encontramos que en todas estas se dan casos similares; menores de edad que, la mayoría de las veces, han sido obligados a realizar actos sexuales mientras eran grabados.
Tan sólo hace unos días Los Mossos d’Esquadra detuvieron a un joven de 19 años en Martorell (Barcelona) por ofrecer a menores de edad grabar un vídeo pornográfico cada semana a cambio de 900 euros. Se le imputan diversos delitos y ha quedado en libertad con cargos. El joven ya fue juzgado en este año por hacer las mismas proposiciones a otro menor. Hace un mes la Policía Nacional detuvo a diez personas, cinco de ellas menores de edad, por distribuir vídeos pornográficos con adolescentes de 12 a 15 años a través de Internet y aplicaciones de telefonía móvil.
Cada vez encontramos que es más fácil acceder a contenido donde menores son abusados, las redes sociales han contribuido a la rápida difusión de este tipo de videos y al inmediato acceso a ellos. Un caso claro es el que se dio el pasado mes de abril, el de “Palanquilla.En tan solo unas horas un video donde aparecia una jóven realizando una felación al “Palanquilla” llegó a ser “Trending Topic” (Tendencia del momento) en una conocida red social, preocupante, por cierto. El resultado fue tres imputados por grabación y distribución de pornografía infantil. Unos días después la Policía interceptaba un nuevo vídeo. Una menor de 13 años se había grabado masturbando a una niña de 4 años. El vídeo se difundió a la velocidad de la luz por una aplicación de mensajería instantánea además de hacerse público en una plataforma de internet. Seis menores fueron arrestados.
Ante abrumantes casos y para prevenir la normalización de los hechos es importante que tengamos presente qué es la pornografía infantil y cómo está tipificado en el Código Penal de nuestro país. Como bien explica un artículo reciente del periódico El Mundo: “Conviene saber qué es la pornografía infantil y qué se considera delito. En España, esa actividad concreta queda recogida en el artículo 189 del Código Penal, que prevé penas de hasta cinco años de cárcel para quien utilice menores de edad para elaborar cualquier clase de material pornográfico, así como para quien lo distribuya “por cualquier medio”, “aunque el material tuviere su origen en el extranjero o fuere desconocido”.La pena se puede disparar a hasta nueve años de cárcel “cuando se utilicen a niños menores de 13 años”, o bien si el material es particularmente degradante o vejatorio, especialmente violento o el culpable tiene alguna responsabilidad sobre el menor (ascendente, tutor, maestro, etc.)”
Creemos que es importante difundir y hablar sobre esta problemática tan retrograda que se da en nuestra sociedad, si eres padre/madre haz consciente a tus hijos, si eres joven, conciencia a tus iguales, si consumes pornografía entiende que estás alimentando tu deseo con sufrimiento de otros (puedes leer más aquí).
Si alguna vez encontraras material sospechosos deberías informar a autoridades y nunca difundir, hacer público o investigar por cuenta propia. Podemos denunciar de manera anónima aquello que nos parezca sospechoso a la Policía Nacional y a la Guardia Civil. A continuación te facilitamos los enlaces donde puedes hacerlo:
http://www.policia.es/colabora.php
https://www.gdt.guardiacivil.es/webgdt/colabora.php
También puedes denunciar de manera anónima a través de asociaciones dedicadas a protección de los menores como Protégeles.
Niños y adolescentes son víctimas de abuso sexual cada día, y no sólo eso, sino que también su imagen es expuesta y difundida de manera instantánea por las redes donde pedófilos hambrientos esperan poder saciar sus deseos más animales.
Según datos proporcionados por Save The Children se estima que en todo el mundo una de cada cinco mujeres y uno de cada diez hombres reconocen haber sufrido abuso sexual en su infancia.
¿Tiene esto algo que ver con la Trata de Seres Humanos?
En muchas ocasiones mujeres y niñas victimas de trata con fines de explotación sexual han sido previamente abusadas durante años por sus propios familiares cercanos. En una entrevista un tratante dijo esto: “Estoy agradecido a los padres y familiares de las chicas, ellos son los que hacen el trabajo de entrenamiento, nos las dan preparadas para hacer lo que queramos con ellas”.
Las personas que han sido abusadas sexualmente llegan a estar tan sometidas, a sentirse tan poco valiosas, crean tal rechazo hacia ellas mismas que cuando alguno le ofrece dinero o una “oferta de trabajo” donde van a pagarle por hacer lo que durante años han esto haciendo, ser abusadas, simplemente aceptan, son víctimas.
Nuestro vocabulario, lo que vemos, de lo que hablamos…
No seamos ignorantes, seamos conscientes.
Creamos en el cambio y creemos el cambio.
Fuentes:
Fin de la Esclavitud 