Jovencitas a domicilio

“Chicas chinas, 18 años. Muy dulces. Domicilio y hotel”. Por cada anuncio de este tipo, con foto de la joven incluida, los periódicos embolsan más de 100 euros. En total, son 15.000 euros al día que proceden directamente de las mafias que explotan a las mujeres. El negocio de la prostitución mueve en España 18.000 millones de euros anuales.

Los anuncios de Prostitución en prensa… ¿Es una cuestión de interés editorial o hay detrás un interés económico?

El Plan integral contra la Trata elaborado por el Gobierno y que entró en vigor el 1 de Enero de 2009, además de definir prostitutas como “víctimas” instaba a los diarios a que, mediante la autorregulación, eliminasen cualquier relación empresarial con la prostitución.

Estos anuncios también violan la defensa de la dignidad de la mujer recogida en la Ley de Igualdad, que en su artículo 1 dice que “Los hombres y mujeres son iguales en dignidad humana e iguales en derechos y deberes”. Los anuncios de contactos contienen mensajes que en nuestro contexto son peyorativos, inhumanos y degradantes. Sin olvidar las imágenes estereotipadas que aparecen junto a la publicidad y el prejuicio social que se crea de estas mujeres. Además, podrían incluso atentar contra la Constitución, que en el artículo 10 defiende “La dignidad de las persona, derechos inviolables que son inherentes y el libre desarrollo de la personalidad”, y su artículo 15, donde se reconoce que nadie puede estar sometido a tratos “inhumanos” o “degradantes”.

Publicidad encontrada hace unos días en nuestro coche particular.

“Publicidad” encontrada hace unos días en nuestro coche particular. Tipo de anuncio similar al que encontramos en periódicos.

La publicidad para la “comercialización del sexo” resulta tan sumamente lucrativa para los periódicos que difícilmente renunciarán a ella. En estas obscenas páginas impresas la capacidad de amar a las personas parece quedar reducida a la compraventa de servicios para el sexo. ¿No debería prohibirse esta publicidad por promover indirectamente el comercio del sexo?

El problema de todo esto es que no hablamos solamente de anuncios. Como decíamos, detrás de cada anuncio de contacto está la sospecha de mafias de trata de personas y algunos medios de comunicación se están aprovechando de ello.

En el verano del 2010 se destapó una red que utilizaba los anuncios de contactos para explotar a más de 350 mujeres. Con esta actividad el grupo criminal obtenía más de 700.000 euros mensuales.

Altamira Gonzalo, presidenta de la Asociación de Mujeres Juristas Themis dice “Que hay trata de blancas en nuestro país es una realidad y los medios de comunicación mantienen una postura contradictoria en este sentido. Por un lado, se manifiestan en contra de estas mafias y, por otro, mantienen los anuncios de explotación sexual”.

En Francia los anuncios de prostitución están prohibidos y penados desde el 2003, como recoge Público. La Justicia de Francia castiga este tipo de publicidad con penas de hasta tres años de cárcel y multas de hasta un millón de euros. En Reino Unido está duramente regulado. Los anuncios de contactos no son ilegales, pero si la policía detectara que hay relación entre un anuncio de prostitución y una red de explotación, se hará responsable criminal al medio.

Cada día, miles de mujeres son víctimas de trata en España. Los principales periódicos de este país siguen manteniendo anuncios de contacto, cuyo anonimato es aprovechado por las mafias para explotar sexualmente a seres humanos. Mientras sigan existiendo anuncios de contactos, se estará contribuyendo a la normalización de esta actividad.

Diarios como Público, 20 minutos, ADN y La razón, entre otros, rechazan anuncios de prostitución y sobreviven sin estos ingresos.

Desde Fin de la Esclavitud creemos que todo tipo de actividad que publicite el comercio sexual como recreo, donde la mujer es simplemente el objeto de diversión, debe estar prohibida. Por eso te animamos a firmar esta petición para acabar con los anuncios de contactos en los periódicos españoles.

Creemos que el Fin de la Esclavitud es posible, para ello es imprescindible tu ayuda. #findelaesclavitud

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Fuentes:

Periódico La Razón: http://www.larazon.es

Periódico Púbico: http://www.publico.es

REVOLUCIÓN MASCULINA

Consumir sexo con mujeres esclavas o liberar a esclavas del sexo

#sinclientesnohaytrata ese es el hashtag que miles de argentinos usan para denunciar la trata de seres humanos con fines de explotación sexual. Lema muy acertado, pues aún hoy, aunque sea de manera inconsciente, seguimos apuntando a las mujeres víctimas como mujeres culpables. Es interesante analizar el contexto socio cultural en que el maltrato, la explotación, la violación, y la degradación  a la mujer en todas sus formas se da, y como todos somos participes de ello, aunque sea de manera involuntaria.

Un detalle que ejemplifica esto son las campañas contra la violencia a las mujeres. Hasta principios del año 2000 los mensajes de estas campañas contenían lemas como “Cada quince segundos una mujer es maltratada” en vez de “Cada quince segundos un hombre elige maltratar a una mujer”.

Aún hoy en algunos países los anuncios están dirigidos a las víctimas, en vez de al maltratador, creando un sentido de culpabilidad en la misma y por otro lado ignorando el acto del maltratador.

Con el consumo de prostitución ocurre lo mismo. Analizamos y hablamos de las prostitutas, los medios hacen reportajes sobre su situación, ganancias, experiencias, pero nunca nadie habla de los consumidores de sexo, de los que realmente están alimentando la cadena de degradación a la mujer y, siguiendo el hilo de la prostitución, incentivando los negocios de las mafias que trafican con mujeres.

Es fácil llegar a la conclusión de que si no hubiese hombres demandantes de sexo, no habría prostitución y mucho menos mujeres víctimas de trata con este fin.  Pero los datos nos muestran lo contrario, el  79% de la trata de personas es con fines de explotación sexual. Sin clientes no hay trata.

La imagen que la sociedad crea de la mujer está basada en múltiples factores, y es curioso que muchos de ellos son creados por nosotros mismos. Las mujeres nacemos en un contexto donde el factor “temor” es crucial para sobrevivir.

Desde pequeñas, somos educadas para “no llamar la atención” para “huir de aquel señor que nos quiere dar un caramelo y, tal vez, algo más”, vestidas “sin provocar”, concienciadas en que “andar solas por la calle a altas horas de la noche es peligroso”, etcétera. Tal vez lo estamos haciendo mal. Tal vez debemos comenzar a educar a los hombres en el pensamiento de igualdad, de respeto, de valor,  a ver a la mujer como un igual y no como un objeto momentáneo de placer, educar para ver la belleza más allá del físico y valorar más allá del cuerpo.

Es necesario un cambio en los hombres, en la masculinidad y en la visión de éstos sobre la mujer y la feminidad.  Según encontramos en http://hombresabolicionistas.wordpress.com/ “la inmensa mayoría de  clientes que consumen prostitución son hombres (90%) y la mayoría de las prostitutas son mujeres (95%) datos que muestran cómo en una época de libertad sexual como la actual, los que acuden a la prostitución lo hacen como un ejercicio de poder y dominación sobre otra persona con la que no tienen que tener ninguna consideración, porque la pagan. La masculinidad está en crisis y es el momento de transformarla en pro de la igualdad.”

Con esta cita de  Lydia Cacho queremos animarte a ser parte del cambio, a ser de esos hombres que valoran a la mujer, que entienden el sexo más allá de un acto comprado, que miran con ojos de respeto. Te necesitamos, necesitamos que seas parte de la revolución masculina:

“Una nueva revolución masculina es imperativa. Una nueva generación de hombres, no guerreros, no armados, no amenazados con castigos celestiales, no violentos, sino poseedores de una sólida idea de equidad y progreso. El poder masculino tiene que reinventarse antes de que las mafias y la sociedad global irresponsablemente desinteresada logren convencer a todas las niñas de que ser esclava sexual es la única vía para estudiar comer tener bienes y servicios; antes de que otra generación crea que comprar esclavos es algo progresista y moderno”.

Creemos en el fin de la esclavitud y en que tú eres parte de ello.

En los próximos días 14, 15  y 16 de Mayo tendrá lugar en Sevilla el I Congreso Universitario contra la Esclavitud en el Siglo XXI.  

La guerra no es juego de niños

UNICEF define un “niño y niña soldado” como todo menor de 18 años que forma parte de cualquier tipo de fuerza armada regular o irregular o grupo armado en cualquier capacidad. Incluye niñas y niños reclutados para practicar actividades sexuales y/o contraer matrimonio obligatorio. La definición, por tanto, no sólo se refiere a un niño o niña que porta, o ha portado, armas. (Basado en los “Principios de Ciudad del Cabo”, 1997)

Cifras

No hay cifras fiables del número de menores soldados en el mundo. Según datos de Naciones Unidas, en 2012 al menos se reclutaban niños y niñas soldados en 17 países como Afganistán, Sudán, República Democrática del Congo, Malí o Yemen.

Se calcula que hay alrededor de 300.000 niños y niñas menores de 18 años que participan en más de 30 conflictos en todo el mundo. Se les utiliza como combatientes, mensajeros, porteadores y cocineros,  para desempeñar servicios sexuales… Algunos son víctimas de secuestros o se les ha reclutado por la fuerza y otros se ven obligados a unirse debido a la pobreza, el abuso y la discriminación, o en busca de venganza por actos de violencia realizados contra ellos o contra sus familias.

¿Por qué y para qué?

Reclutar niños y niñas soldados es una práctica habitual en el seno de muchos conflictos en todo el mundo. La guerra y la violencia se tornan una situación normal, la única que muchos menores han conocido. Estos niños y niñas han sido secuestrados en la calle o sacados de las aulas. Otros muchos son forzados a salir de sus casas a punta de pistola, mientras unos padres angustiados los ven partir sin poder hacer nada. Otros son reclutados mientras juegan cerca de casa o caminan por la carretera.

Hay más posibilidades de que los niños y las niñas se conviertan en soldados si están separados de sus familias, desplazados de sus hogares, viven en zonas de combate o tienen un acceso limitado a la educación. En algunas ocasiones, puede que se unan a los grupos armados porque es la única manera que tienen de obtener un alimento diario y garantizar su supervivencia.

En algunas situaciones, el entorno  acepta o incluso alienta la participación de los niños y las niñas en los conflictos como soldados. Estos combatientes menores de edad pueden participar “voluntariamente” en los actos de guerra, sin darse cuenta de los peligros y los abusos a los que serán sometidos.

En el caso de las niñas soldados, además de la brutalidad y el trauma derivados de las violaciones en sí, pueden verse afectadas por las lesiones físicas graves, los embarazos forzados, así como contagio de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual.

En un mundo donde millones de niños “juegan a la guerra” con pistolas de juguete o a través de videojuegos, otros muchos niños y niñas se ven obligados a vivir la guerra de verdad, convirtiéndose en combatientes desde edades muy tempranas. Para ellos la guerra no es divertida ni les hace sentir más fuertes. El reclutamiento de niños y niñas soldados sigue siendo una realidad hoy en día. Un ejemplo es Malí, cuyo conflicto actual involucra a niños y niñas soldados.

Si quieres mostrar tu repulsa, puedes firmar en Amnistía internacional: http://www.es.amnesty.org/actua/acciones/mali-ninos-ninas-soldados/

Una película que muestra esta realidad es Rebelde (War Witch). Este conmovedor drama canadiense, nominado al Oscar 2013 a la Mejor Película de Habla no Inglesa, es un retrato de denuncia hacia las penurias de la infancia y la supervivencia de los niños soldado, mostrado emotivamente a través de la voz, los ojos y experiencias de la pequeña protagonista Rachel Mwanza, así como una historia de amor entre los dos adolescentes protagonistas, quienes tratan de escapar de un mundo violento.

Puedes ver el trailer, muy muy recomendable:

A continuación también puedes ver unas fotos que realizamos de una exposición organizada por Amnistía Internacional. Se trata de dibujos realizados por niños de entre 6 y 16 años que fueron reclutados para ser soldados. Como verás las secuelas con las que estos niños conviven para el resto de sus vidas van mucho más allá de las provocadas por “empuñar un arma”. Ven a sus familias asesinadas, son violados, abusados, maltratados, drogados… A  modo de “entrenamiento”, hacen incluso que coman la carne cruda y los órganos de sus enemigos, pero también de los familiares que ellos mismos han asesinado.


1. “Paz, paz”

     

2. Dibujo de soldados.  Dibujo hecho por niño de 16 años que fue reclutado cuando tenía 8. Observa que las armas son proporcionalmente más grandes que las personas.

2. Dibujo de soldados. Dibujo hecho por niño de 16 años que fue reclutado cuando tenía 8.
Observa que las armas son proporcionalmente más grandes que las personas.

3."Cómo matábamos cuando éramos soldados"

3.”Cómo matábamos cuando éramos soldados”

4. Dibujo que narra lo que ocurrió cuando los soldados vinieron a reclutar a este niño. Mataron a su abuela y a su tío. En el camino a Guinea el hermano del niño fue tirado por la borda. Niño de 15 años.

4. Dibujo que narra lo que ocurrió cuando los soldados vinieron a reclutar a este niño. Mataron a su abuela y a su tío. En el camino a Guinea el hermano del niño fue tirado por la borda. Niño de 15 años.

5.Dibujo de soldados

5. Dibujo de soldados

6. Información AI

6. Información AI

7. Detalle del dibujo número 4 "Ellos también mataron a mi madre".

7. Detalle del dibujo número 4 “Ellos también mataron a mi madre”.

Que niñas y niños sean sometidos a la guerra y sus constantes abusos, obligados a ser soldados, se considera una forma de esclavitud. Terminemos con la esclavitud infantil. Toda niña y todo niño tiene derecho a jugar, reír, soñar, estudiar y en definitiva,  a ser feliz, a ser niño.

Fuentes:

http://www.unicef.es

http://www.es.amnesty.org

Hoja de Datos: Niñas y niños soldados Unicef

*A partir de hoy mismo puedes seguir nuestra página en Facebook, búscanos: “Fin de la Esclavitud”.

Podrás estar al tanto de las actualizaciones del blog y  encontrarás información de actualidad sobre la Esclavitud de nuestro siglo XXI

ABRE LOS OJOS

Según Naciones Unidas, España figura entre los principales países de destino de la trata, sobre todo de mujeres con fines de explotación sexual, aunque también destaca su condición de país de tránsito. Sin embargo, se desconoce el verdadero alcance y naturaleza del fenómeno debido a la falta generalizada de datos relativos a su dimensión, evolución, magnitud, etc. Dicha carencia se debe, en gran parte, a la ausencia de estadísticas oficiales anuales sobre el número de víctimas desglosadas por género, edad, nacionalidad… así como de mecanismos de seguimiento.

Las víctimas de trata de personas viven, por tanto, una vida marcada por el abuso, la violación de sus derechos humanos y el control constante que sufren por parte de sus tratantes. Por ello, aunque cada víctima puede tener una experiencia diferente, existen ciertos comportamientos o situaciones que, en mayor o menor medida, son comunes y permiten que a través de ciertos indicios, se pueda detectar una situación de trata.

Todo lo que hemos publicado hasta ahora en el blog, ha estado centrado en ofrecer información general sobre la trata, pero creemos que es importante comenzar a dar algunos recursos informativos y a la vez prácticos, para afrontar el problema de la trata en nuestra comunidad, ciudad y país.  Aunque en ocasiones éstas pautas parezcan inaplicables, podemos garantizar que son realmente útiles, pues nos ayudan a ir con los ojos bien abiertos y fijarnos en señales que tal vez, de otra manera, no llamarían nuestra atención.

Obviamente, las características que se indican a continuación, son sólo una idea general de un perfil de víctima, con el que nos podemos encontrar. Éstas pautas, nos sirven para detectar posibles comportamientos, situaciones o señales que nos puedan indicar que estamos ante probablemente, personas que estén siendo víctimas de las redes de trata de seres humanos.

SIGNOS que se dan en las VÍCTIMAS DE TRATA:

OBSERVA indicios, quizás te puedan ayudar a identificar a una posible víctima de trata. Los tratantes de personas utilizan diversas técnicas para mantener esclavizadas a sus víctimas, algunas de las cuales son:

Servidumbre por deuda: Obligaciones financieras, compromiso de honor de satisfacer la  deuda.

Aislamiento: Limitación del contacto con personas ajenas, medidas para vigilar todo  contacto o para que éste sea superficial.

Aislamiento respecto a su familia.

Confiscación de pasaportes, visados o documentos de identidad.

Violencia física, psicológica o sexual contra las víctimas o contra sus familiares, así como  la amenaza de aplicarla.

• Amenaza de deshonrar a las víctimas revelando las circunstancias a la familia.

Atemorizar y manipular a las víctimas haciéndoles creer que si se ponen en contacto con las autoridades serán encarceladas o deportadas por violar disposiciones de inmigración.

• Control del dinero de las víctimas – por ejemplo, guardándolo para que “esté bien seguro”.

•  Adicciones. Las víctimas suelen ser coaccionadas para que consuman drogas, para sobrellevar su situación.

El objetivo de estas técnicas es atemorizar y someter a las víctimas. Por lo tanto, el aislamiento en el que se encuentran las víctimas se ve acentuado, a su vez, por el hecho de que muchas de ellas no hablan el idioma del lugar de destino y provienen de países donde se desconfía de la acción de las autoridades.

Un ejemplo de esto, podemos encontrarlo en las últimas semanas, donde hemos visto como diferentes redes criminales han caído. En todas ellas, podemos encontrar una y otra vez como se  daban las distintas formas de coacción que hemos expuesto con anterioridad.

Ayer mismo en Málaga, la Policia Nacional desarticuló una red. En esta obligaban a las chicas a jurar fidelidad a la organización realizando brujería, donde se les obligaba a comerse el corazón de una gallina. Según podemos leer en el artículo publicado en el periódico 20minutos: “El ritual de vudú empleado por la organización era “tremendamente efectivo”, según la Policía, ya que generaba un “miedo insuperable” en las mujeres, que temían por sus creencias que al no cumplir su promesa se volverían locas o incluso perecerían.

UNA DE NUESTRAS EXPERIENCIAS

Desde que empezamos a conocer el problema de la trata, no podemos evitar mirar directamente a los ojos de las personas que nos cruzamos por las calles y caminar alertas ante cualquier posible señal. La indiferencia ya no cuenta, la autocompasión tampoco.

En ocasiones hemos visto en las calles de nuestro barrio como varias mujeres, extranjeras y vestidas como si fueran a la mejor fiesta, caminaban sin titubeo y acompañadas de “un caballero” que les agarraba a su antojo, como si dispusiera de ellas.

Andábamos muy cerquita de ellas y también de él, para ver si podíamos escuchar algo de la conversación, pero nadie hablaba… Sólo el “amable caballero”,  reía a carcajadas y contaba, cual narrador, sus valiosas conversaciones con otros tantos caballeros.

Seguíamos intentando no llamar la atención, el sonido de los tacones de las tres chicas ocultaban el bajito sonido de nuestras pisadas. Pero él se giró, nos vio y detuvo su mirada sobre nosotras. Aunque nosotras también le mirábamos a los ojos, no tardamos más de un segundo en variar la dirección de éstos e imitar el mismo gesto que las otras tres chicas mantenían como permanente.

El hombre se detuvo y por supuesto arrastró del cuello (literalmente) a las otras tres mujeres, y con sus ojos marcó el camino que debíamos seguir, nos dejó paso, sería lo que cualquier peatón describiría.  Sabíamos, sospechábamos, y él sabía que sabíamos.

Sin duda, aligeramos nuestro paso, como si tuviéramos mucha prisa, y cuando ya nos separaba una distancia prudente, miramos hacia atrás. Se habían parado en esa puerta, aparentemente una casa baja cualquiera, de un barrio cualquiera. Curiosamente, ya habíamos observado ese sitio antes, muchos hombres entran, algunas mujeres esperan, las cortinas siempre están echadas y también ese lugar, parece comunicar con un negocio que hay al lado.

Esta historia, no es un caso aislado. Cada día, podemos ver algunas “realidades sospechosas” a nuestro alrededor. Como siempre, te animamos a que puedas ser factor de cambio en estas situaciones.

¿Qué puedes hacer para detener la esclavitud y la trata de personas?

  • Se un abolicionista del siglo XXI. Involúcrate en la lucha para detener la esclavitud en tu barrio, tu ciudad y por todo el mundo. Este es un punto de partida para estar activo ante el problema.
  • Aprenda sobre la Trata de Seres y la esclavitud de nuestros días.
  • Averigua lo que está sucediendo en tu ciudad y en tu país.
  • Lee sobre el tema, hay numerosos libros y estudios que pueden serte de ayuda.
  • Educa. Habla sobre la existencia de la esclavitud de nuestro siglo. Díselo a tus amigos, familia y vecinos.
  • Enseña  a los jóvenes y a los adultos jóvenes la conexión que hay entre la industria sexual y el comercio sexual. Detén la demanda antes de que comience.
  • Aprende como identificar a las víctimas de trata. Busca señales y mantente alerta a las indicaciones. Con frecuencia a las víctimas las esconden a plena vista.
  • Exija productos “libres de esclavos”, es decir de libre comercio. Normalmente éstos llevan un símbolo de “comercio justo”.

Millones de mujeres y niñas son víctimas de la industria de la esclavitud sexual. Son abusadas todos los días, y tienen muy poca esperanza de escaparse. El problema es monumental, la necesidad es abrumadora. En respuesta a esto, algunos han decidido darse por vencidos  y no luchar, otros han decidido ignorar del todo el problema…

La apatía no es una opción:  Creemos en el fin de la esclavitud.

HABLAR con propiedad

 

En inglés el término “Human Trafficking”  hace referencia a la trata de seres humanos. En ocasiones, en español, y al realizar literalmente la traducción del anglosajón, caemos  en el error de decir “Tráfico Humano” cuando en realidad queremos referirnos a la problemática de la “Trata de personas” o “Trata de seres humanos”.

Es importante que entendamos y sepamos utilizar adecuadamente ambos términos, pues son grandes las  diferencias. A continuación, queremos esclarecer las disimilitudes entre los mismos, a fin de poder hacer un buen uso del vocabulario correcto.

–        Tráfico ilegal de personas (Tráfico humano): Consiste en el transporte y la facilitación de la entrada ilegal de una persona dentro de un Estado del cual no sea nacional o residente permanente. Esta labor se realiza siempre con el fin de obtener, directa o indirectamente, un beneficio financiero o de orden material. El traficante, a diferencia del tratante, pierde el control sobre la persona después de llegar al destino final o cuando recibe su pago. Por ejemplo, los llamados “Coyotes” de México que ayudan a cruzar las fronteras hacia Estados Unidos a personas que no poseen documentación legal.

–        Trata de personas o Trata de seres humanos: Se emplea para referirse al acto de reclutar, albergar, transportar, suministrar u obtener personas para obligarlas a realizar trabajos forzosos o actos de comercio sexual mediante el uso de fuerza, fraude o coacción. La Ley de Protección de Víctimas de la Trata (TVPA) del año 2000 (Pub. L. 106-386), según enmiendas, y el Protocolo de Palermo describen este servicio obligatorio con diversos términos, incluidos servidumbre involuntaria, esclavitud o prácticas similares, servidumbre por deudas y trabajo forzoso.

Una vez comprendida la diferencia entre estos conceptos, debemos saber que la Trata de Seres Humanos adquiere varias formas y que existen diferentes tipos de esclavitud, es importante que sepamos identificarlos:

  • Trata con fines de explotación sexual : Cuando un adulto es obligado, forzado o engañado con el fin de que ejerza la prostitución, o se le mantiene en ella por uno de estos medios tras haber consentido inicialmente, esa persona es víctima de trata. Cualquiera de los que participen en el reclutamiento, albergue, transporte, provisión u obtención de personas para ese fin son responsables del delito de trata. La trata con fines de explotación sexual también puede ocurrir como parte de la servidumbre por deuda, en los casos en que mujeres y niñas se ven forzadas a seguir en la prostitución debido a una “deuda” ilegal supuestamente contraída a cambio de su transporte, reclutamiento o hasta su cruda “venta”, que los explotadores insisten debe ser pagada antes de ponerlas en libertad. El consentimiento inicial de una persona de participar en actos de prostitución no es determinante desde el punto de vista legal: si subsiguientemente se mantiene a la persona en servicio mediante manipulación psicológica o fuerza física, él o ella es víctima de trata.
  • Trata de menores con fines de explotación sexual : Cuando a un niño o niña (menor de 18 años) se le induce a cometer actos sexuales a cambio de dinero, no hace falta probar que el proxeneta usó fuerza, fraude ni coacción para que el delito sea clasificado como trata de personas. No hay excepciones a esta norma: no debería haber racionalización cultural ni socioeconómica que impida el rescate de niños que se encuentran en servidumbre sexual. El uso de menores de edad en el comercio sexual está prohibido por la ley y por estatutos en la mayoría de los países del mundo.
  • Trabajo forzoso: El trabajo forzoso, a veces también llamado trata laboral, abarca toda la gama de actividades –reclutamiento, albergue, transporte, provisión u obtención– involucradas cuando una persona usa la fuerza o amenazas físicas, la coacción psicológica, el abuso del proceso legal, el engaño u otros medios coercitivos para obligar a alguien a trabajar. Los migrantes son especialmente vulnerables a esta forma de trata de seres humanos, pero las personas también pueden ser obligadas a trabajar en su propio país.
  • Trabajo en condiciones de servidumbre o servidumbre por deuda: Una forma de coerción es el uso de una caución o deuda. Las leyes estadounidenses prohíben el uso de una deuda u otras amenazas de daño económico como forma de coacción, y el Protocolo de Palermo exige que se penalice como una forma de trata de personas. Algunos trabajadores heredan la deuda; por ejemplo, en el sur de Asia, se calcula que hay millones de víctimas de trata que trabajan para pagar las deudas de sus antepasados. Otros resultan víctimas de tratantes o reclutadores que ilegalmente explotan una deuda inicial asumida como condición del empleo.  La servidumbre por deuda de trabajadores migrantes contraída en sus países de origen, a menudo con la ayuda de agencias de trabajo y empleadores en el país de destino, también pueden contribuir a situaciones de servidumbre por deuda.
  • Servidumbre doméstica involuntaria: La servidumbre doméstica involuntaria es una forma de trata de personas que se da en circunstancias particulares: El trabajo informal en una residencia privada. Estas circunstancias crean vulnerabilidades singulares para las víctimas. Los lugares de trabajo doméstico son informales, conectados con el lugar donde vive el trabajador en sus horas libres, a menudo no compartido con otros trabajadores.
  • Trabajo forzoso de menores : Aun cuando los niños pueden realizar ciertos trabajos legalmente, ciertas formas de esclavitud o prácticas similares a la esclavitud siguen existiendo como manifestaciones de trata de seres humanos, pese a las prohibiciones legales y a la condena generalizada de dichas prácticas. Un niño puede ser víctima de trata de personas independientemente del lugar donde ocurre explotación no consensual. Algunos indicadores de posible trabajo forzoso de menores incluyen situaciones en las cuales el niño aparenta estar bajo la custodia de alguien que no es pariente, que obliga al niño a realizar trabajo que beneficia económicamente a alguien fuera de la familia y que no ofrece al niño la opción de irse.
  • Reclutamiento y empleo ilícitos de niños soldados : Los niños soldados son una manifestación de trata de personas cuando involucran el reclutamiento ilegal o el empleo de niños mediante la fuerza, el fraude o la coacción, por parte de las fuerzas armadas para que sirvan como combatientes o realicen otras formas de trabajo. Algunos niños soldados también son explotados sexualmente por grupos armados. Los perpetradores pueden ser las fuerzas armadas de un gobierno, organizaciones paramilitares o grupos rebeldes. Muchos niños son secuestrados por la fuerza para ser empleados como combatientes. A otros se les obliga a trabajar como cargadores, cocineros, guardias, sirvientes, mensajeros o espías. A las niñas se las puede obligar a casarse o mantener relaciones sexuales con combatientes del sexo masculino. Tanto las niñas como los niños soldados a menudo son objeto de abuso sexual y tienen un alto riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.

 

Como bien sabemos, todos los países se ven afectados por la trata de seres humanos. Si es verdad, que algunos cumplen con las normas mínimas, pero esto no significa que hayan logrado erradicar la esclavitud moderna. De hecho, ningún país está haciendo lo suficiente para ello.

El movimiento abolicionista mundial moderno, tiene menos de una generación de vida. Son muy pocas las víctimas identificadas, no hay suficientes servicios para los sobrevivientes y son demasiado pocos los tratantes que reciben sanciones penales. Muchos gobiernos del mundo han promulgado leyes contra la trata, pero se necesita que los gobiernos las apliquen de forma amplia y efectiva. Los que se niegan a reconocer el problema están siendo superados por organizaciones no lucrativas, ciudadanos, hombres y mujeres de todas partes del mundo que están reclamando acción y exigiendo el avance para enfrentar el inmenso reto que todavía queda.

Esta realidad, como otras muchas, nos queda distante, en ocasiones pareciera que no se corresponde con el mundo en que vivimos, es decir con “nuestra realidad”. Es por eso que debe existir en nosotros el esfuerzo de acercarnos a las víctimas que están envueltas en esto, al conocimiento del problema, sus causas y consecuencias y que entendamos que ésta sí es la realidad.

A continuación, puedes ver un video donde dos adolescentes de México relatan su dura historia. Estamos seguras de que estos minutos de video te harán entender mucho más acerca de lo que está ocurriendo. Recuerda, existen 27 millones de historias que aún no han sido contadas.

 
 
 
 
 
 
 
Información obtenida:
Informe TIP 2012, EE.UU. http://www.state.gov/documents/organization/195803.pdf